Emanuela Orlandi, hija de una empleada del Vaticano, desapareció en el año 1983 cuando tenía 15 años de edad. El padre, Gabriele Amorth, relacionó la desaparición de Emanuela con un culto satánico en el Vaticano. El hermano de Emanuela, Pietro Orlandi, hasta la fecha sigue investigando la verdad sobre la desaparición de su hermana Emanuela. Según reporta el insider Illuminati de la Logia Propaganda Due, Leo Zagami, la Oficina de Prensa de la Santa Sede informó el pasado lunes 29 de octubre que “durante algunas renovaciones en una habitación anexa a la Nunciatura Apostólica en Italia, situada en Roma, Via Po n.27, se encontraron algunos fragmentos de huesos humanos” que las autoridades italianas ya están investigando. En una actualización del 2 de noviembre, Leo Zagami reportó que el análisis de los huesos encontrados en la Nunciatura Apostólica en Roma muestra que son compatibles con los de un ser humano adolescente de entre 12 y 16 años, es decir que encajan en el rango de edad de Emanuela Orlandi y otra chica de nombre Mirella Gregori quien también desapareció en 1983. Según la investigación de Leo Zagami y la familia de Emanuela Orlandi, todos los indicios apuntan a que la desaparición de Emanuela está relacionada con un culto satánico en el Vaticano, “aunque todavía estamos esperando los resultados finales de la prueba de ADN, pero otra evidencia importante es el hecho de que el entonces vecino de la embajada en Via Po no.25, Giuseppe Scimone, es miembro de la infame Banda de la Magliana (la Magliana Gang), una organización criminal italiana con sede en Roma, vinculada al Vaticano, a los servicios secretos italianos (conocidos en ese entonces como SISMI), y a figuras Illuminati poderosas, como Licio Gelli, el fallecido Adorable Maestro de la logia masónica Propaganda Due (P2).” En su informe, Leo Zagami incluye reportes del Vaticano, de las autoridades italianas que conducen la investigación, de diversas entrevistas con Pietro Orlandi en 2012 y 2015, y de una misteriosa “grabación de la supuesta voz de Emanuela mientras fue violada por tres misteriosos hombres.”
Restos humanos descubiertos en un edificio del Vaticano podrían revelar los sacrificios satánicos de la Santa Sede
Esta es una noticia que informo con gran tristeza, especialmente porque involucra a Emanuela Orlandi, la hija de 15 años de una empleada del Vaticano que ha estado desaparecida desde 1983. Pietro Orlandi, a quien entrevisté varias veces en el pasado años, se ha convertido en un buen amigo y alguien a quien admiro y respeto por su diligencia en la búsqueda de la verdad sobre la desaparición de su hermana Emanuela.
Espero que con este avance en el caso de Emanuela, Pietro encuentre las respuestas que ha estado buscando. Los restos humanos de Emanuela aparentemente han sido descubiertos el lunes durante los trabajos de renovación que se llevan a cabo en un edificio anexo a la Nunciatura Apostólica en Italia, básicamente la embajada de la Santa Sede en Roma.
Un comunicado emitido en las últimas horas por la Oficina de Prensa de la Santa Sede dice que la policía del Vaticano fue llamada a la escena, pero de inmediato reportó el hallazgo a las autoridades italianas. Esta es la traducción de la declaración completa emitida por la Oficina de Prensa de la Santa Sede:
“Durante algunas renovaciones en una habitación anexa a la Nunciatura Apostólica en Italia, situada en Roma, Via Po n.27, se encontraron algunos fragmentos de huesos humanos. El Cuerpo de la Gendarmería intervino rápidamente en la escena, informando a los Superiores de la Santa Sede, quienes informaron de inmediato a las autoridades italianas apropiadas para las investigaciones y la cooperación necesaria en el asunto. En la actualidad, el fiscal jefe de Roma, el Dr. Giuseppe Pignatone, ha ordenado a la división forense y al escuadrón móvil de la sede de la policía de Roma establecer la edad, el sexo y la fecha de la muerte.”
El espeluznante descubrimiento que puede revelar la impactante verdad sobre el satanismo en el Vaticano ya está siendo noticia en todo el mundo y llega la noche de Halloween, 25 años después de que dos adolescentes, Manuela Orlandi y Mirella Gregori (cuyos huesos también podrían estar involucrados en el descubrimiento), desapareció misteriosamente en Roma en un rango de tiempo de 40 días. Los investigadores ahora están comparando el cráneo y los dientes con el ADN de Orlandi y Gregori. Un abogado que representa a la familia de Orlandi exigió más detalles al Vaticano tras el descubrimiento de los restos.
“Preguntaremos a la oficina de los fiscales de Roma y a la Santa Sede cómo se encontraron los huesos y por qué el hallazgo se relaciona con la desaparición de Emanuela Orlandi y Mirella Gregori”, dijo la abogada Laura Sgrò, quien agregó que “La declaración publicada ayer por la Santa Sede no proporciona mucha información.” Los huesos podrían pertenecer a dos personas, según me informaron fuentes bien informadas, pero ahora necesitamos la confirmación definitiva del análisis de ADN.
Este es un breve pasaje de mi libro Confesiones de un Illuminati Vol.3, que incluye un capítulo completo dedicado a mi investigación personal sobre el asunto:
“Emanuela Orlandi estuvo vinculada a la desaparición de otra adolescente, llamada Mirella Gregori, quien desapareció el 7 de mayo de 1983 y nunca más se le volvió a ver. Emanuela asistió a una escuela de música romana en la plaza Sant’Apollinare, y el día de su desaparición, en la calle que conectaba el instituto del Vaticano, se encontró con un extraño que conducía un automóvil verde. La atrajo con una oferta de empleo en la industria de la comercialización de cosméticos, que se llevaría a cabo durante un desfile de modas, con un sueldo extravagante (375,000 liras, aproximadamente el equivalente a un salario de la época). La joven de 15 años, antes de aceptar, dijo que tendría que obtener el permiso de sus padres. Más tarde, a las 7 de la tarde de esa noche, ella salió de la lección de flauta que estaba tomando y llamó a su casa para informarle a su papá la propuesta. Su hermana le dijo que desconfiara de la irrealmente tentadora oferta y que volviera a casa lo antes posible para discutirlo en detalle con su madre. Este fue el último contacto que tuvo Emanuela con su familia. El difunto padre, Gabriele Amorth, aunque no tenía conocimiento directo de los hechos, relacionó la desaparición de Emanuela con un culto satánico en el Vaticano.”
2 de noviembre: Los huesos encontrados en la embajada del Vaticano en Roma podrían ser los de un humano adolescente
En las últimas horas, el análisis de los huesos encontrados en la Nunciatura Apostólica en Roma muestra que son compatibles con los de un ser humano adolescente de entre 12 y 16 años, es decir que encajan en el rango de edad de Emanuela Orlandi y Mirella Gregori en el momento de su desaparición en 1983.
Por supuesto, todavía estamos esperando los resultados de la prueba de ADN, pero otra evidencia importante es el hecho de que el entonces vecino de la embajada en Via Po no.25, Giuseppe Scimone, es miembro de la infame Banda de la Magliana (la Magliana Gang), una organización criminal italiana con sede en Roma, vinculada al Vaticano, a los servicios secretos italianos (conocidos en ese entonces como SISMI), y a figuras Illuminati poderosas, como Licio Gelli, el fallecido Adorable Maestro de la logia masónica Propaganda Due (P2).
Al parecer, algunas de las personas que intentaron llegar a un acuerdo con el Vaticano con respecto a Emanuela Orlandi eran miembros de la Banda della Magliana.
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