El pasado sábado 2 de marzo la Crew Dragon fue lanzada al espacio en un cohete Falcon 9, llevando unos 180 kilos de carga a la Estación Espacial Internacional. Sin embargo, lo mas interesante de esta misión es que estaba principalmente dedicada a probar las capacidades de la nave para realizar viajes tripulados. Este primer vuelo de prueba no llevaba personas, sino más bien lo que describen como “un dispositivo antropomórfico de pruebas”, una especie de maniquí que bautizaron como Ripley, el cual estaba plagado de sensores y tecnología para realizar pruebas y análisis durante el viaje.
Además, también incluyeron un pequeño peluche con la forma de la Tierra para que flotara cuando se encontrara en microgravedad, el cual se convirtió en un éxito en ventas sin que sus fabricantes se enteraran de qué estaba pasando.
La nave, tras haberse acoplado con éxito con la Estación Espacial Internacional, ahora ha regresado a la Tierra, última fase en su primera misión de prueba.
Este es otro logro histórico para SpaceX, debido a que se trata de un paso importante hacia un futuro próximo en el que la NASA pueda volver a enviar astronautas desde Estados Unidos, sin depender de otras agencias espaciales, algo que no es posible desde que fue cancelado el programa de transbordadores espaciales.
Lo siguiente para SpaceX será realizar estudios y análisis de la misión de prueba, y si todos los resultados son positivos, tienen en sus planes realizar la primera misión de pruebas tripulada en el mes de junio, que llevará dos astronautas de la NASA a la Estación Espacial Internacional.
fuente NASA
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